LOS HOMBRES SON MÁS TORPES QUE LAS MUJERES AL ESTACIONAR

La creencia popular indica que los hombres son mejores a la hora de manejar que las mujeres.  Y ni hablar si el tema se circunscribe al estacionamiento. Horas de discusiones, bromas al pasar y hasta algún insulto exacerbado son consecuencia de esta maniobra.

Sin embargo, hay un estudio español que a afirma todo lo contrario y sentencia que los varones son peores al momento de estacionar que las damas, especialmente entre los 18 y los 40 años.

Para la UNESPA, la asociación empresarial del seguro, los hombres jóvenes son más torpes al momento de estacionar y que las mujeres son menos propensas a colisionar con el vehículo durante estas maniobras. Además, asegura que los del sexo masculino se dan golpes más fuertes contra, columnas y cordones, que después resultan en reparaciones más costosas.

El análisis elaborado por esta asociación revela que casi un 27 % de los 29,1 millones de vehículos de todo tipo que circulan por España cuenta con cobertura de todo riesgo. Es decir aquellas que también cubren daños en el vehículo propio. Este porcentaje incluye tanto los que tienen franquicia como los que carecen de ella. Y para el estudio se toman las denuncias hechas a las aseguradoras luego de un incidente para reclamar por la reparación.

Los resultados muestran que los conductores sin experiencia, tanto hombres como mujeres, son los más proclives a darse un golpe contra una columna o un cordón al estacionar. Superada la inexperiencia inicial, la propensión a la siniestralidad de ellas se modera notablemente mientras que la de los varones vuelve a crecer y se mantiene siempre por encima de la de las mujeres hasta llegada la década de los cuarenta. Los peores conductores aparcando son, con claridad, los hombres de entre 18 y 40 años.

Si se analiza la gravedad de las colisiones resultantes de la maniobra, tanto en calles como en garajes, de nuevo la conclusión es que los jóvenes varones son los conductores más torpes al volante. No sólo se dan más golpes, sino que sus colisiones son más fuertes y causan desperfectos más caros de reparar. Esta situación se estabiliza en torno a los 28 años, una vez que se alcanzada los 10 años de experiencia con el carnet de conducir, momento en el que hombres y mujeres padecen siniestros de gravedad prácticamente idéntica .